Siguiendo la estructura de una larga carta dirigida a un adolescente,
el autor analiza algunas de las cuestiones éticas más esenciales para la
sociedad actual: el correcto ejercicio de la libertad, la aceptación de la
responsabilidad, la necesidad de la convivencia entre humanos para poder llevar
una vida plena, el saludable deseo de disfrutar de la vida y de los placeres
que ésta nos ofrece, la ineludible relación entre ética y política y la
obligada reflexión acerca de cuestiones como la conservación del planeta o la
realidad de la inmigración.
Mediante un lenguaje
accesible y cercano, Savater logra que seamos conscientes de la relevancia que
tienen en nuestra vida las consecuencias derivadas de nuestras decisiones
diarias.
“Es
mejor saber después de haber pensado y discutido, que aceptar los saberes que
nadie discute para no tener que pensar.”
Fernando Savater